Canción para una sirena

De Roberto Hidalgo, músico, compositor, cantante de blues, y sobre todo buena persona y amigo generoso, os hablé no hace mucho. Le había comentado que me haría ilusión poner música al escrito: Betty, la sirena coja. Le gustó el poema y no tardó en ponerse manos a la obra y hacer unas pequeñas adaptaciones y arreglos en la letra dada la extensión. Y este es el resultado: un tema precioso, melódico y evocador que capta muy bien la esencia del escrito y lo magnifica. Estoy eternamente agradecido por esta creación, este regalo. Realmente conmueve y emociona.

Así que lo comparto con vosotros. La música, la poesía, las letras…nunca dejaran de ser el bálsamo del caminante y una caricia para los corazones. Feliz año 2023.

Boca de guitarra

Roberto Hidalgo es un compositor y poeta urbano de gran sensibilidad, un «bluesman» de Alicante, del cual tengo el honor de ser su amigo. Perded el tiempo de escucharlo y ganaréis en calidad de vida, pues la música y la poesía son el bálsamo del caminante.

Nos conocimos hace ya unos años, trabajando en las alturas. No, no éramos ángeles camuflados, ni azafatos de vuelo, ni funambulistas caminando por la cuerda floja, ni pilotos de ultraligeros, ni superhéroes encaramados en antenas parabólicas vigilando las calles…bueno lo de superhéroes, un poco sí. Trabajábamos en el sector de la construcción, a veinticuatro plantas del suelo en andamios donde no hubiese subido ni spiderman y bajo presión del villano de turno, pero no era la ausencia de vértigo lo que nos permitía «volar» sino las alas de la imaginación, la creatividad y la ilusión de compartir aquello que nos hacía felices a nosotros: los sueños.

Los sueños hacen libre al hombre del encierro de la crisálida de la mente, en ocasiones nuestro peor enemigo. Y el tiempo ha pasado desde entonces y no hemos dejado de volar, en cielos distintos, siempre libres.