Ni Yin, ni Yang. Ni Todo, ni Nada.
La gran paradoja: El infierno no es un lugar horrible, es un lugar hermoso, algunos lo llaman planeta Tierra, su otro nombre es Paraíso.

«De Diógenes compré un día
la linterna a un mercader;
distan la suya y la mía
cuánto hay de ser a no ser.
Blanca la mía parece;
la suya parece negra;
la de él todo lo entristece;
la mía todo lo alegra.
Y es que en el mundo traidor
nada hay verdad ni mentira;
todo es según el color
del cristal con que se mira».
Ramón de Campoamor